Magda Ximena Sarmiento Gómez
En el municipio donde yo vivo Facatativá la
problemática social es pan nuestro de cada día, siempre que se va a realizar
cambio de gobierno se presentan gran cantidad de candidatos ya sea para asumir
el cargo de alcaldes o para hacer parte del concejo municipal, todos con un sin
número de propuestas y promesas las cuales ni ellos mismos se las creen, lo más
triste de todo es que nuestro hermoso municipio cada día esta en peor estado y
esto se ve reflejado en el deterioro de las carreteras, en el mal uso de los
espacios públicos, la mala imagen en la carrera primera, vía por donde pasan a
diario turistas, la drogadicción, la llegada de tanto indigente y esto
acompañado de inseguridad y delincuencia.
¿Para donde irán todos los ingresos que se
recolectan en impuestos y todas las ayudas que envían otros entes
gubernamentales?
Aquí se ve reflejada la falta de ética y la
inmoralidad, los funcionarios de gobierno municipal afirman que el municipio no
tiene recursos para nada, no hay progreso, nunca hay mejoras, es aquí donde la conciencia y doble moral está en
juego, porque para actividades de recreación de los funcionarios y diversión si
se pueden invertir gran cantidad de millones, pero para tratar de mejorar el
municipio si es imposible.
Es necesario poner en
práctica un código de ética y de valores
institucionales que se convierta en
herramienta fundamental del sistema, allí se deben encontrar estipulados y
definidos los valores y principios fundamentales que rigen la Administración
Municipal y que hacen partes de la cultura de la organización. La conducta de
los funcionarios de la Administración del Municipio, debe ser IRREPROCHABLE en
todo momento y en todas las circunstancias. Cualquier deficiencia en su
conducta profesional perjudica la imagen e integridad de los funcionarios,
perjudicando a su vez la imagen y buen nombre de la Entidad, es por ese motivo
que se debe tener en cuenta la adopción y aplicación de un Código de
ética, que busque promover la confianza
de todos los funcionarios y de la sociedad en general. No podemos dejar de lado
la estrecha relación que se conforma entre el Control Interno, los valores y
los deberes de cada servidor público. El “deber hacer”, supone el “deber ser”,
en cuanto éste, se soporta en un valor que ambienta y motiva a cada persona a
cumplir con su deber, toda vez que lo percibe para sí y para su entorno.
El ser humano es un concepto biológico. Las personas son aquellos que
poseen criterios morales, es decir, son productos sociales.
Desde la perspectiva de como nosotros nos relacionamos como
individuos capaces de reaccionar frente a ciertos estímulos y necesidades
nos podemos denominar como personas sociables. Pero como sabemos al tratar
de satisfacer todas nuestras necesidades no podemos dejar a un lado
la idea de ser seres egoístas; si yo deseo y lo puedo realizar lo hago aunque
afecte a alguien en el camino, entonces estoy con mi moral ya establecida desde
el seno de mi hogar y mi ética desenvuelta según mis necesidades.
Todo esto se ajusta a una doble moral que argumento con mis necesidades y
metas, ya la corrupción es un término que se nos adentra no solo a nuestro
vocabulario, también lo hace en nuestro propio ser.
Anteriormente se habló de la doble moral y la corrupción en amplios rasgos
pero es necesario hacer un alto en el camino para observar en que aspectos de
la vida nos esta esto afectando aún más de lo que ya está afectando nuestras
acciones diarias; y es cuando entramos a la vida laboral en donde comprendemos
que muchas veces lo que yo quiero no puedo conseguir como yo quiero; es decir,
nos encontramos con una nueva realidad en donde las oportunidades de suplir mis
necesidades no me las generan los demás, si no que al contrario yo
debo buscar métodos y mecanismos para poder crear esas oportunidades. Y
es que todos no tenemos la misma ética o argumentos para nuestras
acciones, y para ser más específicos todos somos diferentes pero a la vez
iguales.
Al ser seres humanos biológicamente somos iguales en derechos y deberes,
pero también somos personas, que es el término utilizado para definirnos como
seres racionales y sociables con una moral y ética diferente; por lo cual
en el mundo laboral se ha establecido una corrupción y doble moral, para
que solo aquellos que estén dentro de mi zona de confort sin afectarla puedan
obtener unas ventajas y mejores condiciones laborales sin mayor esfuerzo. Un
ejemplo más detallado es el acenso o acceso a cargos públicos municipales en
este caso; en el municipio de Mosquera nos encontramos con diferentes
organismos de control para diferentes áreas como educación, salud y demás. Pero
para acceder a estas vacantes laborales debo ser familiar o conocer a quien
hace la entrevista o alguien que trabaje allí con un cargo alto. Si mi hoja de
vida es excelente y cuento con diferentes soportes de estudios y buena
experiencia; esto no valdrá de nada si me pongo en balanza con el hermano de un
funcionario que acaba de culminar con sus estudios. Por ejemplo los concejales
de este municipio, sin tener que dar nombres propios, nos ofrecen grandes
oportunidades laborales así no tengamos cierta experiencia lo importante es que
usted le sirva a él en algún aspecto, ya sea para quedar bien con otra
persona, por tener alguna ganancia económica o acceso a otro tipo de
necesidades como fisiológicas.
Con lo anterior entonces, estamos en un mundo laboral altamente
corrupto, debido a que nos encontramos con el tan repetitivo tema del
tráfico de influencias, el pan de cada día para la etapa de comenzar a ser
adultos; pero el mayor problema es que cuando iniciamos nuestra adultez,
iniciamos con nuestra vida laboral y profesional y es aquí en donde nuestra
ética se moldea más bruscamente, aprendiendo de los que ya están establecidos.
LA CORRUPCIÓN DENTRO DE LA CONTRATACIÓN O
ADJUDICACIÓN DE LICITACIONES EN EL MUNICIPIO DE FACATATIVÁ
Para abordar este tema me permito recordar
las palabras de la Filósofa Adela Cortina quien en su texto sobre El Mundo de
los Valores escribe: “”Humanizar” significa potenciar a los seres que son
valientes en sí mismos – cualquier persona, incluidos nosotros mismos-,
mientras que “deshumanizar” significa instrumentalizar a esos mismos
seres” (Cortina, 1997). Me parece bastante interesante éste planteamiento
porque de cierta forma revela la realidad sentida en los procesos de corrupción
en el campo político que lleva a la “deshumanización”; en los cuales los
contratistas se convierten en instrumentos para lograr obtener dinero, poder o
un vago reconocimiento que satisface el ego de quienes se encuentran en las
altas cumbres del liderazgo político a cambio de la adjudicación de un
contrato.
De que otra manera podríamos describir a
un empresario, que en un municipio como lo es Facatativá, depende de la
adquisición de contratos para poder sacar su empresa adelante y con ella a su
familia y a las familias que depende de él y, que se vea obligado a, como dice
el argot popular, a “untarle la mano” a un político para poder lograr ganar la
licitación pues sabe que si no lo hace otro empresario lo hará y entonces
perderá la posibilidad de un trabajo.
Es triste pensarlo, pero en realidad los
contratistas son instrumentos, herramientas las cuales pueden ser fácilmente
reemplazadas cuando ya no son útiles o cuando aparece una mejor. Por lo que se
genera una deshumanización.
El escritor Español José Luis cañas define
la deshumanización como la pérdida del sentido de la vida. En palabras
del filósofo Argentino Roberto Perez, podríamos definirlo como vivir la vida
desde un sentido cuantitativo o quizás podríamos realzar su valor llevándolo a
la vivencia de un proyecto de vida. En cualquiera de los casos la
“deshumanización” segué siendo detrimento de la sociedad. En este sentido
podemos afirmar que la corrupción desdibuja la esencia del ser, lo reduce.
En contraste debería existir un sentido de
justicia, de equidad en donde se retribuye el esfuerzo, la calidad, el
conocimiento, la dedicación y demás factores que deberían ser importantes a la
hora de adjudicar contratos. Recuerdo que en el Libro de Adela Cortina sobre El
Mundo de los Valores ella propone un test para los valores desde el cual se
evidencia que algunos de ellos en realidad no son tan importantes, Por ejemplo
la belleza. Si se es hermoso o no, no es determinante para la vida, es decir
que no es determinante para la vida. Pero cuando se habla de la justicia se
debe entender que es un valor que nos hace esencialmente humanos. Por lo cual
no deberíamos renunciar a ello. En un mundo ideal los políticos, empresarios y
todas las personas del común deberíamos entender esto y luchar por la
supervivencia de este tipo de comportamiento moral y ético.
En conclusión, la corrupción dentro de los
procesos de licitación es un fenómeno con efecto de bola de nieve. Cada día va
creciendo más y más deteriorando nuestra sociedad, convirtiendo a las personas
del común en instrumentos, herramientas que permiten lograr más poder, recaudar
más dinero o, de forma más insensible, suplir esa necesidad de adulación o
reconocimiento.
REFERENCIAS
Cortina, A. 1997 El Mundo de los Valores
Ética y Educación. Editorial El Buho. Recuperado de http://datateca.unad.edu.co/contenidos/100001/adela-cortina-el-mundo-de-los-valores.pdf
Cañas, J. 2010. De la Deshumanización a la
Rehumanización. Pensamiento y Cultura. Recuperado de
file:///C:/Users/Usuario1/Downloads/Dialnet-DeLaDeshumanizacionALaRehumanizacionElRetoDeVolver-3257827.pdf
La administración que inicio el año 2016 ha venido presentando varias
falencias una de ellas es el sentido de pertenencia con el municipio ya que se ha
extendido de manera exagerada la nomina de la alcaldía. El problema es que se está
gastando mucho dinero en cosas y cargos innecesarios, el personal es
traído de otros lugares y se olvidaron de las personas que apoyaron
constantemente la campaña y que además se encuentran capacitadas para estos
cargos.
Los habitantes de Cachipay no nos explicamos el por qué teniendo las vías tan en mal estado prefieren inventar cargos que no son necesarios y malgastar el dinero de forma absurda en vez de invertirlo en el mejoramiento de las vías, en el mantenimiento del alcantarillado ya que se encuentra en muy mal estado y con estas lluvias tan fuertes se han tapado la mayoría de alcantarillas y el desperdicio de agua es impresionante.
Algo que es muy importante de resaltar es que no han terminado el primer año de administración y ya el municipio cuenta con varias demandas debido al mal manejo y a las malas decisiones.
Muchos nos preguntamos cómo ira a terminar esto porque la verdad se
esperaba mucho más de esta administración y cada día son más las fallas que
cometen.
Conclusiones
·
Encada una de las
reflexiones hechas se puede ver como cada uno de nosotros en nuestro contexto
más cercano hemos podido percibir la forma como la semilla de la corrupción ha
ido dando su fruto. Sus ramas han llegado a diferentes estadios dentro del
campo político: contrataciones, licitaciones, deviación de recursos, entre
otros. Esto me recuerda las palabras de Mauricio García Durán en su escrito
sobre el Camino de la Ética Civil en Colombia (Garcia,1991):
“Indiscutiblemente el punto de
partida en este sentido es la constatación de una situación que indica que algo
no está funcionando social y éticamente en la Colombia de los años 90”.
Ésta es la realidad sentida que
ha deambulado por nuestros gobiernos por mucho tiempo y como él mismo dice: “no
hay coincidencia en la lectura que se hace de los mismos: para unos es vacío
ético, para otros crisis ética, y para otros colapso moral”
No importa cómo se defina, quizás
es pura terminología pues en esencia es el rechazo directo a la vivencia de la
Justicia, es, de manera inconsciente, renunciar a un aspecto que nos hace
humanos para comportarnos como animales en dónde cada uno busca su
beneficio propio sin importar los métodos que deba emplear para lograrlo.
·
Leyendo y analizando
el tema o problemática de todos veo que de una u otra manera estamos abordando
el mismo tema, es muy triste ver la decadencia en los cargos públicos, y como
esta falta de ética afecta a la sociedad entera.
·
Cada municipio
recibe una partida x por las obras, proyectos y desarrollo. Recuerdo que hace
algunos años Facatativá logró un reconocimiento por su buen manejo fiscal. De
hecho el Alcalde electo en ese momento dijo que Facatativá estaba mejorando
porque se le había prestado mayor atención a aquellas problemáticas que eran
urgentes. Ello significa que, quizás se emplearon los recursos de la manera en
que se habían programado. O quizás la corrupción fue menor y por eso, aunque no
llegaron todos los dineros destinados a su objetivo final, si llegó una gran
parte de ellos.
Sin embargo, hoy se ve más
decadencia en el municipio. La desviación de recursos hace que las obras se
estanquen, el comercio disminuye, la inversión se minimiza, la violencia
aumenta y con ella todos los flagelos que mencionas.
·
Hay una pequeña línea
que separa nuestras temáticas. Sin embargo, el veneno de la corrupción ha
llegado a todas las esferas o lugares donde las personas, hablo de un gran
número no del total de ellas, la practican.
En tu análisis puedo ver como en
Mosquera, al igual que en Facatativá, se desdibujaron los principios y valores
sociales que propendían por el desarrollo equitativo de la sociedad. Ahora,
muchos líderes políticos han instrumentalizado a los contratistas, o empleados
de las entidades públicas para que de forma somera trabajen por la comunidad,
pero en esencia terminan trabajando para ellos y, de esta manera llevarlos a
alcanzar sus proyectos de vida.
Es triste ver cómo tanto tu
municipio como el mío han perdido el rumbo de un ideal de vida y se ha
sumergido en proyectos que repercuten en estilos de vida cuantitativos desde
los cuales el beneficio personal se sobrepone sobre el del colectivo.
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